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domingo, 30 de abril de 2017

Un dragón que vuela

¿Quien va a cortarme a mi las sogas? 
La luna está creciente, y yo soy una libélula 
una libélula porque aleteo más de la cuenta, 
que cualquier pájaro que vuela, 
vuela hasta donde sea con un simple aleteo, 
limpio y corto.
En cambio yo, que soy una libélula 
tengo que esforzarme en aletetar tantas veces como pueda
para mantener el vuelo y no caerme. 
Los pájaros son suertudos, ellos no miran atrás. 
¿Quien se va a enamorar de una libélula cuando hay pájaros en el cielo? 
Yo que hablo en metáfora y siento en metáfora, 
que la tristeza me tiene un hueco reservado en su corazón 
porque yo soy la viva imagen de su melancolía
solo florezco en primavera para romantizar una decepción y hacerla flor. 
Cuéntame que no has sido capaz de podarme el pelo, 
que en mi jardín me falto yo,
que las sogas se cortan cuando hace calor
pero siempre alguien las puede desatar.