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miércoles, 6 de junio de 2018

Matilde es mi flor favorita

Mira como el mundo cambia, cariño. Matilde es frágil y lleva cadenas. El mundo cambia pero todos somos los mismos, el mundo cambia pero las grietas no se cierran. Todo cambia, pero Matilde sigue teniendo las mismas heridas desde hace años. Las estaciones pasan, las hojas se caen y vuelven a salir, llega el calor y el frío, las lluvias y la calma; y Matilde sigue sentada en un banco de piedra, quieta, sin mover ni un músculo. Ella siente que el tiempo la quiere, que la quiere de vuelta. Matilde siente vivir dos presentes desconocidos, uno pasado diferente, y otro futuro próximo. Ella está entre dos lineas temporales, en una ve sus heridas curadas, en otra ve sus heridas abriéndose. Paralizada por el tiempo, arrastrada por el pasado, ella vuela quieta, viéndose distinta, viéndose igual, sin verse tan si quiera.
Matilde es un pozo profundo que aguarda un nuevo universo inteligible para la raza humana, es un enigma, un acertijo confuso, tanto que no está formulado en forma de pregunta.